Plantar un árbol frutal

Plantar un frutal

Hay muchas formas de plantar un árbol, pero la más sencilla es tirando de pala y lumbares. Un poco de maña, esfuerzo y menos complicación.

Lo explicamos en un breve vídeo en nuestro canal de YouTube Red Campesina de Asturias.

¿Cuándo y cómo plantar un frutal?

En Asturias (norte de España) la plantación de árboles a raíz desnuda puede realizarse durante los meses de invierno (diciembre a marzo), aunque varía algo según la especie, a los aguacates por ejemplo les interesa una plantación más tardía.

El tamaño del hoyo debe ser justo el que necesita la raíz, abriendo sitio en la dirección que marquen sus desvíos. En terrenos compactados o que lleven mucho tiempo sin cultivar, facilita la labor hacer una pasada de rotovator en la línea, así podremos «palear» con menos dificultad. Previamente habremos añadido las enmiendas calcáreas (caliza o dolomita) si se necesitan. En Asturias, especialmente en la zona occidental, es probable que sea necesario.

Se debe acabar aportando materia orgánica en cobertera. Nunca poner el abono (sea cucho o abono químico) en el interior de la poza, el aporte debe ser siempre superficial.

La barriga del injerto (curvatura en la zona baja del tallo) se debe colocar enfrentada al viento dominante, para que no se rompa si sopla fuerte. Además si el terreno es demasiado húmedo o con tendencia a encharcarse, conviene plantar el árbol «en caballón», es decir, de forma elevada sobre el terreno. Las grandes y profundas pozas solo hacen «efecto tiesto», de forma que la raíz crece bien al principio pero luego se ve frenada por las paredes compactadas del hoyo. También es contraproducente el agua que penetra y no puede escapar, provocando pudrición de raíz.

Como se puede comprobar, para plantar bien un árbol frutal solo hace falta aplicar el sentido común y no complicarse la vida.